La fiesta comenzó desde temprano. Cerca de las 14 se efectuó la primera reunión. Los hinchas se acercaron hacia el dique y allí compartieron asado, hamburguesas, choripanes y demás. Luego, se unieron en un canto palpitando la llegada del colectivo que trasladaba a los jugadores. Llegando las 16, la multitud se trasladó hacia la rotonda que une las rutas 226 y 30, para luego marchar en caravana hacia el Hotel Elegance. Pero la sorpresa sucedió a las 17, cuando se vio al colectivo llegar al lugar inesperadamente vacío. Casi inadvertidos, los jugadores pasaron por el lugar en combis y a una velocidad a la que era imposible efectuar un mínimo saludo. Una larga fila de autos se acercó hacia el Hotel donde se hospedará la delegación y esperó en las inmediaciones alguna muestra de afecto de parte de los jugadores, que hasta el momento habían ignorado al hincha que tanto cariño le brinda. Minutos más tarde, la seguridad permitió a la multitud acercarse a la entrada del edilicio y ahí sí pudo ver a los jugadores de cerca. De todos modos, por la mala manera que se manejó la situación, no se dio todo como se esperaba, ya que por momentos la seguridad se vio desbordada. Por eso, los jugadores saludaron desde una ventana y volvieron a sus habitaciones.
Mañana el plantel se entrenará a las 10.30 en el Club Ferro.
Algunas fotos de la recibida:
Los principales medios también hicieron eco de la recibida. Así lo vieron Clarin, Olé y La Página Millonaria
Así esperaban los hinchas al plantel:
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